Uniradio Informa
11 de Julio de 2011
Los problemas de inseguridad provocados por la deportación masiva de connacionales de Estados Unidos a México a través de Tijuana es un asunto que debe atenderse más como un problema social, que como uno policiaco, manifestó Gustavo Ley Ruiz, subsecretario de Gobierno del Estado.
Explicó que los apoyos para que puedan regresan a sus lugares de origen se otorgan a través de la Secretaría de Desarrollo Social y en coordinación con el Instituto Nacional de Migración y la Casa del Migrante.
Comentó que es una preocupación que las personas que regresan a México por Baja California sean bien atendidos y también les interesa que tengan algo que hacer.
“Hay personas que las deportan por aquí, por Baja California, pero son de otros estados, que colindan con la frontera, nosotros hemos estado apoyando en algunas veces con el traslado para que las personas puedan llegar a su lugar de origen y en este caso darles la atención médica, para estar seguros de que no tengan ningún mal y regresen con bien a su localidad”, dijo el funcionario estatal.
Explicó que por instrucciones del secretario de Gobierno, Cuauhtémoc Cardona Benavides, sostiene una coordinación para recibir por parte del Instituto Nacional de Migración, un reporte del número de personas que son deportadas a Baja California.
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